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PARA PAREJAS

Siempre es bueno satisfacer a tu pareja de una manera placentera prodigándole sexo oral. No hay un manual para hacer el cunnilingus correctamente a rajatabla. No obstante, sí hay consejos que puedes poner en práctica para estimular el clítoris, la vagina y los labios vaginales de tu pareja de una manera satisfactoria. 

Empieza con suavidad 

Es importante empezar con un ritmo e intensidad al mínimo para ir aumentando de forma progresiva a medida que la excitación aumenta. Presta atención a la respuesta de ella, a sus gemidos y a su lenguaje corporal para ver si lo está disfrutando. Primero suave y después un poco más fuerte, mantén el ritmo.

Tómate el tiempo necesario para estimular toda su vagina, su clítoris, sus labios vaginales y su Punto G. Aumenta progresivamente el ritmo y la intensidad de los movimientos de tu lengua. Por supuesto, debes estar atento a escuchar sus reacciones y a leer su lenguaje corporal. Ella debe estar relajada y a la vez excitada.  

Rodea el clítoris 

No vayas directamente a esta zona erógena, ni te centres exclusivamente en él. Primero rodéalo, estimula los pliegues y los labios vaginales. De esta manera, preparas el terreno para varios orgasmos porque la estimulación es total.

Aprovecha para preguntarle qué parte más le gusta que le beses y le toques. Puedes ayudarte con un succionador de clítoris que puedes comprar en un sex shop. Si se hace uso de estos juguetes, es importante lavarlos antes y después de usarlos y hacerlo desde el inicio con intensidad suave.

Puedes estimular su clítoris con movimientos en zig zag o de arriba hacia abajo, hazlo con seguridad. Evita dar lengüetazos.     

Mantén la lengua blanda 

Contrario a lo que se suele pensar, que la lengua presionada puede dar mayor estimulación, esto no es cierto. Mantén la lengua blanda la mayor parte del tiempo. Puedes preguntarle a ella qué prefiere. 

A medida que se acerca el momento del orgasmo, el ritmo y la intensidad lo son todo. Procura que ella te guíe lo más posible mientras os conocéis sexualmente. Con el tiempo y la experiencia, llegarás a identificar mejor sus reacciones y sus movimientos corporales. 

Mantén la comunicación abierta con ella 

Pregúntale qué caricia le gusta, cómo le gusta que le hagan el sexo oral y qué parte le gusta más que le estimulen. Si ella no te habla, pídele que lo haga. Es importante que ambos os cominiquéis de una manera honesta y sincera no solamente cuando estáis teniendo sexo, sino cuando estéis tranquilos. 

También puedes aprovechar para decirle cosas bonitas y/o obscenas para excitar su imaginación. El dirty talk es una manera de conectarte con tu pareja al decir palabras sucias y malsonantes. Esto os convierte en cómplices de la aventura que estáis viviendo.  

Utiliza también tus labios 

No solo debes usar la lengua. Los labios también pueden estimular de una manera agradable al acariciar, presionar, absorber. Puedes hacer de todo con ella. Recuerda, no te vuelvas loco. Controla cada uno de tus movimientos. La seguridad lo es todo. 

Prueba geles fríos o de calor 

El uso de este tipo de accesorios depende de la preferencia de la pareja. Estos geles pueden ayudar a estimular con los cambios de temperatura. Recuerda hacerlo con suavidad y leer las instrucciones del fabricante. 

Estimula otras zonas del cuerpo 

Mientras le practicas cunnilingus a tu pareja con tu lengua y tus labios, puedes aprovechar para acariciar sus senos, sus brazos, su ombligo, su cintura con tus manos. A ella le gustará porque estimula otras zonas erógenas en simultáneo. 

Puedes introducir tus dedos en su vagina con suavidad para estimular su Punto G con ayuda de tu lengua. Los labios vaginales también son otra zona erógena importante que rodea al clítoris. Tienes que besarlos y lamerlos con suavidad con tu lengua caliente.  

Ayúdate con juguetes 

Otra opción que le puede encantar es utilizar algún tipo de juguete para dar una estimulación extra a la zona. Estos pueden ser el vibrador del Punto G o uno pequeño para el clítoris. Estos deben ser limpiados con cuidado antes y después de ser usados. 

Por supuesto, antes pregúntale a ella si se siente a gusto y cómoda con alguno de estos juguetes. Si alguna vez los ha probado. 

Al igual que toda práctica sexual, en el sexo oral, es importante la higiene tanto de ella como la tuya, sobre todo si utilizáis juguetes sexuales. Estos deben ser limpiados antes y después de su uso y secarlos para mantenerlos lejos del sol y del polvo. 

El cunnilingus o el sexo oral a tu pareja es una manera de complacerla y de procurarle varios orgasmos, sin necesidad de hacer una penetración vaginal. Puedes hacerlo en un momento en el que estáis tranquilos y cómodos.

Busca el momento y el lugar oportunos para darle este hermoso regalo a ella. Te lo va a agradecer con creces.